Pilar Galindo, alumna veterana del Bazar del Centro Cultural y gran amiga, nos regala estos versos que destilan melancolía y, aún así, están preñados de belleza y sentimientos.
Escapar
La vida
cansa
Quiero
darle esquinazo
Escapar
La senda
está empedrada de rutinas
que nos
hacen rehenes de la repetición
Cuántas
veces transité este camino
pisé las
mismas piedras
sentí el
mismo dolor
Cuántas
palabras vanas,
hijas de la
costumbre,
golpes de
aíre sin alma,
que troquelan
los días
que
fermentan la sangre
y dejan en
el tiempo una marca cansina
Igual hoy,
que mañana, que ayer…
Qué cansada
la vida
Ya no me
quedan sueños
Se perdió
la ilusión,
murió la
fantasía
Solo quiero
dormir
dormir para
escapar
Y vivir en
los márgenes del tiempo
Sin
recuerdos ni culpas
Despertar cada
día como si fuera nuevo
Sin
arrastrar la carga podrida del ayer
Conservar
la inocencia del principio
Respirar y
soñar, besar y amar
siempre,
siempre
como si fuera la primera vez
No hay comentarios:
Publicar un comentario